Los santos Sergio y Baco fueron soldados romanos del siglo III que se convirtieron en mártires cristianos y que a su vez eran varones gays que se amaban.
El estrecho vínculo entre Sergio y Baco se ha destacado desde sus primeros relatos, y estudios recientes han revelado su homosexualidad. El registro más antiguo de su martirio los describe como erastai (término griego que significa «amantes»). Los eruditos creen que pueden haber estado unidos en el rito de adelphopoiesis (rito de hermandad), una especie de matrimonio entre personas del mismo sexo de los primeros cristianos.

Un clásico ejemplo de los santos unidos por el rito de hermandad, Sergio y Baco eran jóvenes oficiales de alto rango. Sergio era primicerius (comandante) y Baco era secundarius (oficial subalterno). Ambos fueron torturados hasta la muerte en el año 303, en lo que hoy se conoce como Siria, un día después de que se negaran a asistir a los sacrificios a Zeus, lo que revelaba su secreto cristianismo.
Sergio y Baco fueron arrestados y obligados a desfilar por las calles vistiendo ropas de mujer en un intento fallido de humillarlos. Relatos tempranos cuentan que los Santos respondieron coreando que estaban vestidos como esposas de Cristo. Aun más, increparon a sus captores afirmando que si la vestimenta de las mujeres nunca les impidió adorar a Cristo, tampoco se los impediría a ellos. Luego de esto, Sergio y Baco fueron separados y golpeados severamente, provocando la muerte de Baco.

De acuerdo con los primeros manuscritos, Baco se le apareció a Sergio esa noche con un rostro tan radiante como el de un ángel, vestido una vez más como soldado. En esa visión, instó a Sergio a no rendirse ya que se reunirían en el cielo como amantes. Su declaración es única en los relatos martirológicos. Por lo general, en los relatos martirológicos la recompensa prometida es la unión con Dios, no con un amante. En los días subsiguientes a su visión, Sergio fue constantemente torturado para finalmente ser decapitado.
La tumba de Sergio se convirtió en un famoso santuario, y por cerca de 1.000 años, la pareja fue venerada como patronos oficiales del ejército bizantino. Muchas iglesias antiguas fueron consagradas en nombre de Sergio y algunas a veces en nombre de ambos santos. Segio y Baco han sido reconocidos como mártires por la Iglesia Católica Romana y las Iglesias Ortodoxas. La pareja es venerada en iglesias distribuidas por el Mediterráneo, Medio Oriente y América Latina, e incluso fueron venerados por los eslavos.

La Iglesia Católica Romana quitó Sergio y Baco de su calendario litúrgico en 1969, el mismo año en que los disturbios de Stonewall en Nueva York, EE.UU, pusieron en marcha el moderno movimiento de liberación gay. Se supone que fueron «de-canonizados» debido a la falta de evidencia histórica, pero algunos eruditos ven este hecho como una acción anti-gay, ya que claramente tenían iglesias dedicadas a ellos mucho antes de la época medieval. Sergio y Baco siguen siendo santos populares entre los cristianos árabes y ahora entre los cristianos LGBTI y sus aliados.
Además de ambos, hay otros santos de la Iglesia que serían LGBT, incluida la unión de Santa Perpetua y Santa Felicidad, realizada juntas en un anfiteatro del África romana en el siglo III; San Aelred, con varios manuscritos en los que habla del «amor entre personas del mismo sexo» y San Sebastián, que habría sido fusilado y asesinado a golpes por desafiar al Imperio Romano y defender a los cristianos.
que , barvaridad claro ya no quieren escandalizar mas ,la iglesia y fueron deescanonizados