Melvyn Iscove, un psiquiatra canadiense de 72 años, ha sido formalmente acusado de mantener relaciones sexuales con pacientes masculinos mientras eran parte de sus “terapias de conversión” para “curar su homosexualidad”.
El comité disciplinario del Colegio de Médicos y Cirujanos de Ontario ha entregado evidencia y testimonios de que “el doctor Melvyn Iscove practicó sexo oral, anal y masturbación mutua con pacientes masculinos durante sus sesiones de tratamiento”.
El doctor Iscove les indicaba a sus pacientes que participar en actos sexuales era parte de su tratamiento y esto les permitiría dejar de fantasear con ellos. Algo así como quitarles las ganas de tener esas fantasías al practicarlas con él.
Según el informe presentado, estas actividades tuvieron lugar durante varios años entre los finales de los 90s y hasta 2007.
Una de las acusaciones viene de un paciente que consultó cuando era un joven de 20 años debido a que había pasado por una etapa de depresión ligada a su miedo por aceptar su sexualidad, el doctor Iscove le pidió que describiera fantasías sexuales que los involucren a los dos y le dijo “puede tocarme si lo desea”, mientras se bajaba los pantalones. Este tipo de “sesiones de terapia” se realizaron al menos 10 veces con este paciente.
Otro paciente comenzó a ver a psiquiatra Iscove cuando tenía 18 años por depresión y ansiedad, en ese momento dicho hombre se identificó como heterosexual. El paciente dijo que el doctor le preguntó varias veces sobre cualquier sueño que estuviera relacionado con “sentimientos homosexuales”, y sus fantasías heterosexuales fueron descritas por el médico como “una manera de negar su homosexualidad”.
Según el comité, este paciente creía firmemente que el Dr. Iscove estaba tratando de “curar” su homosexualidad y para el 2007 el doctor ya lo había manipulado para participar en actos sexuales.
En Ontario las terapias de conversión se han considerado ilegales desde el 2015, por lo cual el doctor Iscove no cometió un delito respecto a esto en su momento, sin embargo, el mantener relaciones sexuales con pacientes de psiquiatría si es un delito y en este caso se ha catalogado la acusación como abuso sexual. Puede que no haya utilizado la fuerza bruta, pero debemos entender que las personas que lo visitaban estaban pasando por un muy mal momento en el cual eran particularmente vulnerables.
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